No olvidaré tan fácilmente tu sabiduría
cada palabra que de ti salía
con cariño me la decías
carácter fuerte tenías
porque fue muy dura para ti la vida
pero un bello ser humano, difícilmente se olvida.
Me guiaste en mis dudas
me enseñaste que eran demasiado absurdas.
Sé que aún me lees y escuchas
porque palabras de cariño hacia ti, tengo muchas.
Sé que te habría gustado despedirte
pero no querías herirme
tu mirada llena de fuerza y amor
tus manos arrugadas creadas por la experiencia y el valor
casi 91 años de historias
llenas de penas y de glorias
lograste alcanzar metas
me llenaste de fuerza con la unión de tus consejos y letras .
Aunque yo te decía que no tenías que darme nada
siempre algo dulce me regalabas
te sentía como mi abuela
esa que te abrazará cuando pueda.
He aprendido a quererte
ahora he de aprender a cerca, no tenerte
aunque las estrellas te abrazarán tan fuerte
que serán conscientes, que contigo tienen la mayor de las suertes.
Las risas compartidas las voy a enfrascar
en un bote de sueños , que no voy a olvidar.
Lo abriré cuando quiera recordarte
porque eres esa estrella deslumbrante
eres preciosa
y la huella que en mí dejaste, olerá a agua de rosas...
En estos tiempos de incertidumbre, nos acostumbramos a las noticias de dolor, pero somos humanos. No podemos guardar la tristeza para que sola desaparezca. Por la generación que nos ha conseguido dejar la vida que vivimos, son nuestros guerreros, y no deben ser enviados al olvido. Hablo de Lucía, pero nuestros mayores son nuestra mayor fuente de riqueza, transmitiendo sus valores. Hay que quererles , cuidarles y protegerles. Ellos ya han luchado por nosotros.
Seguiremos informando...
